Noticia tomada de: https://www.portafolio.co/economia/finanzas/intereses-reduccion-de-tasas-busca-mitigar-desaceleracion-economica-579796
Varias entidades entraron a competir con disminución de tasas de interés en tarjetas de crédito y otros productos.
a competencia a la que los bancos comerciales se lanzaron el viernes pasado, luego de que Bancolombia anunció una baja en la tasa de interés a la mitad de las tarjetas de crédito, tiene implicaciones que podrían tocan la política monetaria del Banco de la República, pero también tienen que ver con la política del Gobierno de estimular a la economía popular.
En el primer caso, varios analistas consideraron que pese a que las 6 millones de tarjetas (de un total de algo más de 16,1 millones de plásticos) cobijadas por la disminución de tasas de interés por parte de ocho bancos es importante, no plantearían un desafío importante a la política que desde septiembre de 2021 adelanta el Banco de la República de restringir el consumo mediante el alza de las tasas.
Aunque los banqueros dicen que las bajas están encaminadas a explicar que con las medidas apoyan a las familias, especialmente de estratos medios bajos y agricultores en un momento de altas tasas, detrás está la intención de mantener abierto el canal del crédito y más cuando las cifras dicen que se presenta una tendencia negativa en la utilización de los cupos de las tarjetas.
Este indicador, al compararlo con el incremento de la tasa de usura tiene una relación inversa lo que quiere decir que la gente, como es natural ante un escenario de mayores costos, baja la utilización de los plásticos.
El analista económico Alejandro Martínez sostiene que esto afecta principalmente el consumo de los hogares y por ende al comercio en general y dicho fenómeno se vio reflejado en el último trimestre del 2022.
Relacionado con lo anterior, hay que recordar que la usura es una cifra hacia la que siempre se han acercado los costos de las tarjetas de crédito de varias entidades emisoras de esos plásticos y que en la actualidad está en 46,26% E.A.
Martínez señala que esto ha desacelerado aún más el consumo y en línea con las revisiones a la baja del crecimiento económico y bajo este contexto, “Bancolombia (con un total de 2,6 millones de plásticos) bajó los intereses de sus tarjetas de crédito con cupos hasta de $3,9 millones, una movida que beneficiará a sus clientes de ingreso medio y bajo, los cuales se pueden ver más afectados en su flujo de caja por el alza de cuotas”.
A la movida le han seguido Davivienda que a noviembre pasado tenía 1,4 millones de tarjetas de crédito, Banco de Bogotá con 1,4 millones, Banco de Occidente con 572.000, Scotiabank Colpatria con 2,2 millones, Banco Pichincha con 12.000, BBVA con 860.000, Banco Agrario con 340.000 y hasta Findeter, para algunos créditos.
Para el economista Jorge Restrepo, lo que sucede desde el viernes es resultado de la competencia en el crédito del segmento de muy alto costo, en donde hay muchos oferentes en el rubro de consumo, pues en otros es más difícil hacer dicha competencia.
“En realidad esto no tiene un efecto macroeconomico, pero no es despreciable pues puede ser positivo para millones de familias que tienen tarjeta de crédito y es bueno que ellos se puedan mover hacia donde hay mejores tasas”, dijo.
El economista asegura que ese crédito afecta a millones personas pero no necesariamente es grande su impacto en la economía.
Andrés Giraldo, profesor de Economía de la Universidad Javeriana, señala que se podría generar un pequeño efecto en la política monetaria y que las bajas de los bancos hacen parte de lo que cada entidad considera que puede cobrar y advierte que con esto “el sistema se podría dar un tiro en el pie, pues demostraría que el margen de intermediación es muy alto y si los bancos bajan coordinadamente o por competir, uno se pregunta por qué no las hicieron antes. Si lo hacen es por que es rentable cobrar al 20 o el 25%”.
Edgar Jiménez, profesor de Finanzas de la Universidad Jorge Tadeo Lozano asegura que se podría dar un pequeño efecto en la política del Emisor, aunque el segmento al que se le bajó el costo no pesa ni siquiera el 10% del total de la cartera.
Otro aspecto para analizar es lo que en el sector financiero se señala sobre contactos que desde hace varias semanas se han realizado entre el Ministerio de Hacienda y otras entidades públicas con voceros de los bancos y con la mirada de la Presidencia.
En ese sentido, el Gobierno estimularía la adopción de medidas para generar un impulso en sectores bajos y medios y de la llamada economía popular.
Una prueba de eso la dio el propio ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, quien el viernes en la red social Twitter dijo que el “Dialogo entre @petrogustavo @infopresidencia @MinHacienda @SFCsupervisor y sector financiero da frutos: @Bancolombia @Davivienda @Bco_Occidente @BBVA_Colombia @BancodeBogota bajan tasas para créditos de bajo monto. Y anuncio: vienen más apoyos a la economía popular”.
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