En los primeros nueve meses del año, las ventas externas de esta fruta alcanzaron los US$43,2 millones, significando un crecimiento del 20%.
Colombia reafirma su posición como uno de los principales exportadores de pasifloras en el mundo, destacando especialmente por su producción de gulupa (maracuyá morado). En los primeros nueve meses de 2024, las exportaciones de esta fruta alcanzaron los US$43,2 millones, un crecimiento del 20% frente al mismo periodo de 2023, según cifras de la Dian, analizadas por Analdex.
La gulupa representó el 91% de las ventas externas de pasifloras, consolidándose como el principal producto de exportación en esta categoría. Países Bajos fue el mayor comprador, con US$23,6 millones, seguido por Reino Unido (US$7,7 millones), Alemania (US$1,8 millones), Bélgica (US$1,7 millones) y Canadá (US$1,5 millones).
El caso de Alemania es particularmente destacable, con un aumento en las importaciones del 278,9%, mientras que otros mercados muestran crecimientos más modestos o estables.
Sin embargo, el sector tiene los ojos puestos en Estados Unidos, un mercado con alto poder adquisitivo que podría dinamizar aún más las exportaciones, una vez superados los desafíos fitosanitarios.
Las regiones de Cundinamarca, Antioquia, Bogotá y Santander lideraron las exportaciones de gulupa en 2024, mientras que otras como Huila, Tolima y Valle del Cauca aprovecharon sus condiciones climáticas favorables para mantenerse competitivas.
No obstante, el clima ha sido un desafío constante: lluvias atípicas, sequías prolongadas y el aumento de plagas como la mosca de la fruta han impactado la productividad. Sara Areiza Londoño, directora comercial de Jardín Exotics, comentó que la gulupa representa el 25% del volumen exportado y el 31% de los ingresos de la empresa. Sin embargo, la sostenibilidad y la calidad son temas prioritarios.
“La Unión Europea está endureciendo las normativas sobre el uso de químicos, lo que nos exige innovar en prácticas agrícolas más sostenibles sin comprometer los estándares de calidad”, explicó Areiza.
Mientras la gulupa sigue ganando protagonismo, otras pasifloras han mostrado resultados dispares. Las exportaciones de granadilla, por ejemplo, cayeron un 14,4%, generando US$3,2 millones, mientras que el maracuyá registró un crecimiento del 5,7%, alcanzando US$985.736.
Según Javier Díaz Molina, presidente de Analdex, el mercado estadounidense representa una oportunidad estratégica, especialmente para diversificar las ventas de estas frutas. “Lograr la admisibilidad fitosanitaria en Estados Unidos podría impulsar significativamente las exportaciones, no solo de gulupa sino también de granadilla y maracuyá”, comentó.
Perspectivas a futuro
El sector de las pasifloras tiene grandes expectativas para 2025, especialmente con la posible apertura del mercado estadounidense y los avances en prácticas agrícolas sostenibles. Sin embargo, los productores coinciden en que es crucial contar con políticas de apoyo para enfrentar los retos climáticos y fitosanitarios.
“La gulupa no solo representa un motor económico, sino también un desafío constante para innovar en sostenibilidad y adaptación climática”, concluyó Areiza. Este fruto, que ya brilla en los mercados europeos, podría ser la punta de lanza para consolidar la presencia colombiana en los mercados internacionales de frutas exóticas.